De África lo que normalmente nos viene a la cabeza, según oímos hablar o nos preguntan por ella es…hambre, enfermedades, pobreza, miseria y todo lo relacionado con un mundo subdesarrollado donde reina el caos. En verdad es normal debido al ataque informativo de este tipo de sucesos que tienen lugar en el país. De lo que no nos hablan e informan es de sus hombres y mujeres, capaces de crear vida cada día y de hacer frente, con su trabajo, su alegría y su actividad organizada y solidaria a los males, internos y externos, que la ensombrecen. Es cierto que lo anterior existe y está muy presente en ella, pero no cesan los esfuerzos por combatir estos problemas e intentar cada día asimilarse al desarrollo occidental.
Una de esas personas es la fotógrafa Angèle Etoudi Essamba, que tras su desarrollo profesional en La Haya, intenta enseñar un punto de vista nuevo para nosotros, donde se enseña la belleza de África bajo las costumbres de las vestimentas africanas. El protagonismo lo tienen las mujeres y sus ropajes. Angèle Etoudi nos muestra el potencial de belleza de la mujer junto con sus trajes tradicionales ascendidos a categoría de moda, porque no llamarlo así. Pretende plasmar la nueva dedicación de la mujer hacia su imagen y no como vulgarmente se piensa en muchos casos, la mujer como ser sometido en África. Es verdad que este hecho se da con mucha normalidad en el país, pero una manera de liberarse por parte de las mujeres es la dedicación a su belleza.
Este interés por revitalizar África también está presente en otros fotógrafos no africanos, como por ejemplo Hans Silvester. Este fotógrafo retrato los atuendos naturales con los que una tribu, en el valle del río Omo entre Etiopía, Kenia y Sudán, se visten. Raices transformadas en accesorios, hojas de plátano hechos collares y algo de pasto y hojas como sombrero es lo que algunas tribus africanas han adoptado como su vestimenta. Es su manera de embellecerse en este caso para una boda de la tribu Mursi.
África está realizando grandes esfuerzos por un cambio en su imagen al mundo exterior, ya sea por la labor de estos cazadores de momentos que tienen en mente una África diferente.